Diario de un crimen habla de fronteras, entre adentro y afuera, Yo y el Mundo, lo legal y lo ilegal, la normalidad y la locura. Las fronteras, en este sentido, no son sólo geográficas o políticas. Las fronteras son cuerpos, lenguajes, sueños, creencias. Todo lo que, posiblemente, nos está uniendo pero también a veces hiriendo, manteniéndonos a distancia. Es un espacio íntimo, intermedio, que permite los pasajes.
CRÉDITOS —
Manu Rosales: Compositor de la banda sonora y producción de sonido.
Pavel Tavares: Director.
Flore de Corbier: Guión y textos.